jueves, 27 de enero de 2022

 

Análisis de la crisis de Ucrania

Carlos del Ama

Doctor en Economía y Relaciones Internacionales

Asesor a la Presidencia Europea en La Conferencia de Paz de la Antigua Yugoslavia

 

Resumen de situación

-          La posible incorporación de Ucrania a la Unión Europea y la NATO supone un serio problema estratégico y de seguridad para Rusia.

-          Implica perder el control de su base naval en Sebastopol. La nueva extensión de la UE acerca el territorio NATO a la frontera Rusa y complica la situación de los ucranianos rusófonos y sus relaciones con Rusia. La amenaza percibida pone en alerta al gobierno ruso.

-          Como consecuencia, Rusia muestra su malestar desplegando tropas en su frontera con Ucrania amenazando con invadirla.

Propuesta para solucionar el conflicto

-          La crisis se resolvería si la Unión Europea y la Federación Rusa se integrasen en una Gran Confederación que crease lo que el Presidente Gorvachov  denominó la Gran Casa Común Europea.

-          La nueva Confederación podría llamarse Confederación del Mar Negro, a la que también debiera incorporarse Turquía.

-          Rusia conservaría su base naval ucraniana, como base conjunta de la Gran Confederación. Que, como solía ser, podría ser utilizada por la flota ucraniana.

-          La armada rusa tendrá la posibilidad de utilizar todas las bases navales del Mar Negro más la de Estambul.

-          Los ruso-parlantes ucranianos podrán elegir su nacionalidad mediante referéndum supervisado por las Naciones Unidas, conservando su estatus de ciudadanos de la Confederación.

-          Ucrania podría incorporarse a la UE y Bielorrusia a la Federación Rusa si así lo desean.

-          En el marco de la nueva Confederación sería fácil acordar entre las partes los detalles de una alianza duradera.

 

Propuesta del marco conceptual para la negociación de la crisis

El riesgo de que la crisis de Ucrania pudiese desembocar en un conflicto bélico urge a buscar soluciones pacíficas creativas. Habermas definió que había dos formas de resolver los conflictos:

                -Mediante la imposición de sus intereses por una de las partes mediante una Acción de Dominio, recurriendo al uso de la fuerza, mediante la agresión directa con costosas pérdidas y dudoso desenlace.

                -Mediante una Acción Comunicativa, recurriendo al diálogo entre las partes en busca de consenso y soluciones beneficiosas para todos los afectados.

Las cuestiones negociables pueden partir de:

-Una situación de suma cero, en la que 1-1=0 y lo que una parte gana la otra lo pierde.

O

-Una situación sinérgica, en la que 1+1=4 y ambas partes ganan, al poner sobre la mesa de negociación nuevos bienes deseables por ambas partes y de los que ambas se pueden beneficiar, bienes que surgen de la cooperación mediante la acción conjunta y coordinada.

El profesor Igor Ansoff definió la sinergia como el incremento del fruto de una acción realizada conjuntamente por varios participantes, de manera que el valor del producto es superior al valor de la suma de las aportaciones individuales.

Antecedentes

El gran éxito de la Unión Europea ha sido convertir a Europa de ser un campo de batalla secular en el que la muerte, la destrucción y la ruina eran endémicas, en una zona de paz y cooperación sinérgica, en la que el consenso, la cooperación y el desarrollo han hecho que pertenecer a la Unión Europea sea un objetivo deseable por muchos países. La mejor definición de la Unión Europea es la de: “Una comunidad comunicativa en la que sus miembros han renunciado a la acción de dominio y la violencia, para resolver sus discrepancias mediante la acción comunicativa por medio de un dialogo permanente institucionalizado”.

Tanto Rusia como Turquía han manifestado reiteradamente su deseo de formar parte de la Unión Europea, pero razones logísticas y socioeconómicas han hecho inviable ambas opciones. No obstante, sería posible alcanzar un alto nivel de comunidad económica, política y social, junto a la creación de un sistema de  seguridad común, mediante la formación entre los tres de una Confederación del Mar Negro, una institución análoga a la actual Unión Europea a un nivel superior como parte de una estructura fractal integra. La Confederación del Mar Negro tendría sus propias instituciones permanentes.

Reflexión final y conclusión

En mi libro Hacia un nuevo Orden Mundial,1972. ISBN 978-1-4343-2993-b, en la página 172 de la versión en inglés, Russia y siguientes, describo cuál sería la reacción de Rusia en el caso de que un día Ucrania decidiera ingresar en la Unión Europea. Mi previsión coincide lo que está pasando. La posición actual de Rusia no solo es lógica, sino que era totalmente previsible.

Ucrania no puede unirse a la UE hasta que Rusia también se asocie con la Unión Europea. Rusia, repito, ha manifestado reiteradamente su deseo de unirse a la CE. Ya en 1991. en su visita a España, el entonces Alcalde de Moscú, Gavriil Jaritónovich Popov, me manifestó. durante nuestra comida en la ciudad de Toledo tras visitarla, que “se había disuelto la Unión Soviética para que Rusia pudiese integrarse en la Unión Europea”. Pero sabemos que por razones de tamaño, técnicas y logísticas su inclusión no parece viable. La solución pasa por lograr que la Unión Europea y la Federación Rusa se unan pacíficamente en términos de igualdad, lo que sería factible mediante una integración de ambas en una federación superior, a la que podría y debiera unirse Turquía.

La Gran Casa Europea es posible,  si se le da una estructura fractal a imagen de la Unión Europea, la cual se incluiría como conjunto en la nueva estructura común. La unión entre la Unión Europea, Rusia y Turquía resolvería el enfrentamiento entre Rusia y Europa y solucionaría, de paso, el largo tiempo demorado deseo de Turquía de asociarse con la Unión Europea.

Si la reconciliación entre Francia y Alemania ha sido posible, haciendo innecesaria la Línea Maginot, también lo es la demolición definitiva del Telón de Acero, abriendo una época de franca colaboración y prosperidad que cancele décadas de enfrentamientos y ruinas.

 

 

5 comentarios:

Rubén Luis García dijo...

Por fin una mirada superadora y europeísta.
Europa se tiene que sacar de encima a USA.
Ya está.
La guerra terminó hace 77 años y la Unión Soviética se disolvió hace 31 años.
Europa debe retomar su identidad y el protagonismo que le corresponde y pertenece.
Basta de ser el idiota útil de las aspiraciones hegemónicas de Estados Unidos.

Unknown dijo...

Asociarse con un gigante decorador sería suicida. Y Turquía no puede entrar en Europa mientras sus planteamientos sean tan contrarios a los valores occidentales. O sea, hasta que no salgan del siglo XII

jardin de cayetana dijo...

Así lo veo yo también

jardin de cayetana dijo...

También me parece bien, pero es cierto también q hay países q pertenecen q están necesitados de correctivos severos q los e caminen a cumplir unos estándares mínimos de DDHH seguramente lo mismo que habría q propiciar con Turquía y Rusia

Carlos del Ama dijo...


El artículo se escribió cuando Rusia inició el despliegue. Ahora llevamos más de un año de guerra tras la invasión. Europa no puede vivir en una guerra fría permanente con Rusia y Rusia necesita a Europa, para empezar como cliente energético, pero lo urgente, ahora, es la Paz.

La vocación europea de Rusia se inició cuando el Príncipe Vladimir se hizo cristiano y se casó con una princesa bizantina. Tenemos que buscar, no ya un acuerdo de paz que termine con el enfrentamiento bélico, sino una un acuerdo permanente que, recortando alguno de los acuerdos entre los miembros de la EU, como la libertad de residencia. Acuerdo al que podría unirse Turquia como alternativa a su no ingreso en la Unión.

Ya no es cuestión de evitar la guerra, sino de lograr la paz